Heraldos de la primavera
La primavera no serÍa completa sin bulbos florecientes. Es una promesa de que llega la primavera. Regálate esta felicidad en el jardÍn y planta ya bulbos de flor. En el momento que llegue la primavera, los bulbos florecientes dibujarán una sonrisa en tu rostro. El color que traen al jardÍn te hará sentir feliz.
Variedad
Para muchos, la primavera comienza realmente cuando florecen los primeros bulbos. Hay muchÍsimas variedades, y todas ellas en diferentes colores y formas. Cada bulbo tiene su propio periodo de floración, por lo que podrás disfrutar de ellos durante más tiempo. Vale la pena ponerle ahora un poco de empeño.
Conocidos y menos conocidos
Los tulipanes, los narcisos, los jacintos, los crocos, los jacintos de uva, los ajos ornamentales y las campanillas de invierno son los bulbos de flor más conocidos. Pero, ¿sabÍas que existen muchas más especies? ¡Eso significa que podrás disfrutar de distintos colores, flores y periodos de floración! Entre ellas se encuentran las glorias de la nieve, los lirios de los valles, las puschkinia, las scillas, las camasias, los jacintos de los bosques, las leches de gallina, las anémonas blandas, los tableros de damas y las ipheion. Hay una amplÍsima variedad, asÍ que combÍnalas como quieras.
Plantación
¿Has comprados bulbos de flor preciosos? Entonces ha llegado la hora de plantarlos. No es difÍcil: Planta los bulbos de flor con la punta del hacia arriba a una profundidad entre dos y tres veces mayor que el tamaño del bulbo. Los bulbos pequeños, como los de las campanillas de invierno, se plantan a una distancia de 5 centÍmetros entre cada uno. Los más grandes, como los narcisos y los tulipanes, a una distancia de 10 cm.